Las celebraciones siguieron durante días no en vano, la Liga se ganó un viernes, curiosamente, con el arbitraje de García Aranda, el mismo que arbitró la final de Copa del 95 contra el Valencia. Al gran éxito de la Liga siguieron cuatro temporadas consecutivas sin bajar del podio de la Liga (2.º, 2.º, 3.º, 3.º)…